lunes, 16 de enero de 2012

Musa del espacio


Musa del espacio
Infinita sobre el cosmos
Reina el universo
Seductora y ondulante.

Bañada de luz de luna,
Dama eterna de las noches,
Con mil demonios tras sus piernas.
Sirvientes fieles sin reproches.

Tentadores y malignos,
Ángeles del cortejo,
Cautivantes seres místicos,
Del Hades o del Cielo,
Fervientes, expectantes
De la musa del espacio.

Ninfa apasionada,
Venus de amor y guerra
Amazona de las estrellas,
El Universo es su Palacio.

El infinito es horizonte
Alcanzable a sus dedos,
Palpable con sus manos,
Tangible en sus labios.

Es su cuerpo infierno celestial.

Heroína y villana,
Es bella y malvada,
Complicada y adictiva,
Fiel amante del amor.

Caminante de galaxias
Coordinando los planetas
Con su don de seducción.
Obediente a los instintos
Temerosa ante la razón
Pues ganan siempre las pasiones,
Gana siempre el corazón.

Y en su alma libertina
Hay sólo un señor,
Marqués de los placeres,
Dueño de su fulgor.

De la Octava Casa, Escorpiana
La ponzoña está en sus besos.

En el Olimpo de su cuerpo
Deseo, es el Zeus de Imperio.

Dioses y demonios..
Amantes fieros envuelltos por el Sol.

miércoles, 4 de enero de 2012

Tiempo de fuego


El tiempo de oro te acompaña
Las décadas de plata nos separan;
Mil puestas de sol
Y otras cuantas lunas devoradas
Por los rayos del amanecer.

¿Pero quien dice que no soy un pájaro
que vuela libre?, y que mis brazos
no son alas que tienen fuego
Y cuando te abrazan, te queman.

¿Quien dice que nos sos un águila?
Que remonta mis alturas,
Y recorre piadoso mis confines celestes;
Que desciende y me atrapa con sus garras
Mientras estrella su pico entre las rocas
Preparándose para el renacer de fénix-amante.

..El tiempo es la línea que
Nos equilibra y nos lanza
A la carpa de la vida en este
“Cirque du soleil” 

Y los días son como horas,
Y las horas infinitas si estoy
Arropada por tu cuerpo.

Si son tus ojos las estrellas que
iluminan mi alma,
Y tu voz es el comando
que dulce me guía
en el sendero del deleite.

Amor, 

Aquí no hay quebrantos, ni tragedias,
No hay más nada que sentir,
Que satisfacción plena y
La pasión a férrea que nos ha de consumir.

Un día más, un día menos.

El tiempo es otra fibra que une
Los hilos de esta manta galáctica
Que cubre nuestras pieles
Al momento de fervor.

Un día más, Divino Marqués.
Es el que espero para arder en tu piel.

Un día menos, Montferrat 
Para las horas del buen amar. 

Y cuando las estrellas se alinien,
Y nuestros cuerpos se batan en guerra,
Alcanzaremos la victoria del terminar predilecto;

Entonces seremos iguales, volcanes hirvientes 
Que trascienden al placer, sin años, sin imprevistos, sin reservas.

Con fuego ardiente y puro, que cuando toca, incendia.

En nuestro tiempo de fuego.