Yo era alma errante, cuerpo sin rumbo. Libertad sin causa y goce secreto.
Era verdad y mentira, era una trampa.
Para mí, para vos, para todos.
Y en la oscuridad, tus ojos inocentes brillaron con la fuerza de mil soles naciendo, explotando en belleza y llenándolo todo de luz. Cambiaron mi mundo. Borraron las nostalgias y me dieron realidad. Con vos hay vida, hay promesas por cumplir y sueños que realizar. Con vos hay un futuro y presente cierto; hay paz y placer.
Tu cuerpo me contiene, mis caricias, mis besos, mis deseos; tu cuerpo enciende la pasión y te disfruto. Amo cada rincón tuyo, cada lunar, cada cabello. Te amo a vos como cuerpo sexual, como espíritu y como mente.
En vos encontré un camino, un hogar, encontré el amor. Vamos en la misma dirección.... yo era alma errante y cuerpo sin rumbo. Pero de eso, ya hace mucho.
Mi amor.