lunes, 8 de mayo de 2023

Migrar

Cambia la vida al dar un paso, al elegir un camino, sea en paz o en guerra, sea por amor o por miedo, la vida cambia.

Arranqué el cordón de mi ombligo y sentí el ardor en el pecho de mis pulmones luchando por el aire, encerrada en la oscuridad y el silencio aprendí a respirar como quien acaba de nacer. Y así fue, sobreviviendo fui dada a luz en una nueva vida, una existencia que aún no termina de escribirse y que a cada letra que leo empiezo a entender.

Me asomo por la ventana y todo me es desconocido, nuevo, extraño; vine al frio inclemente sin ropa, sin vida, sin nada. Y ahora empiezo a luchar como si fuese la primer humana en la tierra, por el techo, por la comida, por la paz. No sabía qué era luchar así, y mi cuerpo se cansa, se resiente, mi alma a veces se queja, pero la voz de los bosques me dijo que estoy donde debo estar.

Mis pulmones aprenden a respirar este aire, mis ojos se maravillan, mi cuerpo encuentra un hogar.