sábado, 7 de noviembre de 2020

Mil muertes

He muerto tantas veces, he dejado tantas cartas, me he visto de muchas formas. Pero aquí estoy, vagabunda en este mundo sin sentido. 

Usando un cuerpo que no siempre me recibe. Ajena de mi misma. Dudando de mis pasos. 

... Cansancio. Saben cómo se siente? Miseria.

Muerte. 

martes, 3 de noviembre de 2020

Confusión

Que soledad inmensa es tener la compañía equivocada.

Como duelen los besos dulces que entre gritos e ira, se pierden en el aire. 

El amor corrompido es como un ramo de rosas marchitas, la podredumbre del alma. 

La belleza es sólo un recuerdo, ahora sólo hay gritos y angustias. 

Veo el reflejo de algo que temo, el final de un capítulo muy largo. Los estragos de poner la fe en algo incorrecto. El resultado de pensar que existe el cambio. 

Nada cambia, todo se transforma; decían los sabios, pero nadie me dijo en qué se transforma.

Hay una imagen que dicen que soy yo, sin embargo no parecía mía. 

Apagada, sin vida, asfixiada. Llena de temores y sin luz. 

Me rechaza y me busca, dice que soy algo que ya no existe, dice que me desea... Pero me rompe. Me culpa. Me odia. 

¿Me ama?

¿Que es la violencia?, ¿será un ciclo que no acaba?, no hay heridas pero si hay marcas.

Estamos tan enfermos, necesitamos ayuda. 

No sé qué hacer. A veces no entiendo nada. 

Somos como niños jugando a tener una casa, a construir algo que nos sobrepasa.

Me siento perdida. 

Responsable de alguien que ya no entiendo. De cargar un peso que no soporto. 

No encuentro nuestro amor. 
Ya no sé si lo busco. 

sábado, 8 de agosto de 2020

Y me ama...

Este amor me exprime la vida,
Me encierra en una nebulosa que no comprendo.
Hay algo extraño que me intriga, 
Es un torbellino del que no aprendo. 

Los mismos movimientos vienen y van, 
Me toma, me sube, me lanza, 
Me levanta, me atiende, 
Me ama. 

Como una tormenta en el desierto, 
Lo mueve todo, lo ataca todo, 
Me arrasa, 
Me despoja, 
Y no aprendo. 

No logro soltarle las manos. 

Es un camino que no termina, 
Así, un día tras otro. 
Encerrada en el anacronismo 
de una vida que no reconozco.

Lucho contra sus garras, 
ya sus dedos me son extraños.

No hay besos, no hay abrazos. 
Sólo un vacío inmenso, 
Silencioso y a veces estridente. 

Es inexplicable. Inevitable. Incomprensible. 

... Doloroso.

Es como una bruma que lo llena todo, 
Sin momentos de calma, 
Con la paz a cuenta gotas.

Pero dice que me ama.


... Y me ama? 

martes, 31 de marzo de 2020

Hacer el amor, ser el amor

Hubo otros antes, hubieron otros caminos, otras manos, otros rostros.
Hubo otras bocas, otros besos, otros gemidos, otros dedos entrelazados.
La respiración entrecortada, el deseo. La pasión.

Hubo sexo, hubo placer, hubo goce pero nunca había hecho el amor.
Con vos hacer el amor es ser hecho por el amor, es construirse, es unir las piezas rotas, es danzar en las nubes de las sábanas, hacer el amor es llorar el alma, reír a carcajadas, hacerse cosquillas. Tener la confianza plena de entregarse por completo, de permitirlo todo, de sentirlo todo.

Hacer el amor con vos es curarse, lamerse las heridas, darle un bálsamo al alma.
Fundirnos como uno solo, como una sola. Sin sexo, sin religión, sin más identidad que la que nos da ser parte de este cosmos, de este universo, de la luz.

El amor nos hace, nos reescribe, nos enseña a conversar, a desnudarnos con inocencia y dulzura, nos enseña a entregarnos en paz, sin ansias, con deseo feroz pero que no destruye, es energía que nos recorre, que nos llena de vida, de amor, amor por todo, amor que sana todo, que lo llena todo; que nos hace crecer y soñar. Es un amor que nos arrulla, nos enternece y nos hace madurar a la misma vez, es como ser todo lo que hemos deseado en el mismo momento.

Nunca había dicho "Te Amo" con lágrimas en los ojos, con el cuerpo temblando, con el alma tranquila, con la palabra firme. Sin las dudas de este mundo. Con vos tengo el alma desnuda, tengo el cuerpo cubierto de tus ojos sensibles, de tus manos suaves y serenas, que me desean y me aman, que me hacen sentir perfecta, humana, divina.

Hacer el amor con vos es un orgasmo puro, limpio, sin ambigüedades, sin nada que ocultar ni secreto que guardar, es gritarle al cielo que nos tenemos, que nos elegimos, que nos amamos.

Con vos, hacer el amor es ser el amor.

viernes, 6 de marzo de 2020

Depresión mayor

Tengo miedo de herirte, te veo tan fuerte y tan frágil al mismo tiempo. Es como si vivieras dentro de un capullo, te veo como algo precioso que de repente saca sus garras y me hiere pero luego, se quiebra. Hay algo dentro tuyo que siempre está roto, como un niño que siempre llora, que se esconde en los rincones de una casa sola.

Siento que estamos solos en nuestro pequeño mundo, quisiera protegerte, rodearte de mí, de mi amor, de mi esperanza, de la belleza que ven mis ojos cuando te veo, quisiera que te vieras a través de ellos, que supieras lo maravilloso que sos. Lo mucho que te admiro y te amo.

Pero tus propios ojos te mienten, tu corazón herido te muestra la vida a través de otro lente. A través del dolor, del miedo, del abandono, de la necesidad y de la angustia.

A veces siento que camino sobre cristal, el mínimo gesto puede herirte, la palabra mal dicha, permitirme el lujo de perder la paciencia puede lastimarte tanto. A veces me siento pesada, cansada, insuficiente, sin fuerzas, me siento egoísta. Quisiera pensar en mí, salir en la noche y perderme en una fiesta, quisiera decir lo primero que se venga a mi mente sin miedo, quisiera sentirme normal, sin dramas ni tragedias. Pero la vida que nos tocó no es tan sencilla, es como si viviéramos vos, la depresión y yo.

Siento como si vivo tratando de evitar daños, esperando que los demás no arruinen nuestros oasis de paz, los días, las horas que hemos logrado. Lo poco, que es mucho, que hemos alcanzado. No soporto tu frustración, los comentarios, los gestos incorrectos de los demás me causan ansiedad, vivo con un nudo en la garganta que no se va.

Quisiera que me vieras, quisiera dejar de ser invisible en el momento de tus crisis, que realmente sepas que estoy aquí cuando te refugias en mí por el daño causado por otros, quisiera que no fuese tan fácil en un momento de cólera decir que no hago nada por vos. Quisiera que por lo menos el cansancio se paleara con reconocimiento.

Hay momentos en que yo misma estoy rota, sola, loca. Es como estar dividida en pedazos que no me corresponden, que no me encuentran, que no se conectan.

¿A donde vamos? ¿ahora qué?

De momentos vivimos como islas, cada quien en su lado de la casa, hasta que se nos pasa la rabia y volvemos a ser felices. Esperando la próxima vez.